Con los fondos recaudados, Homer planea finalmente realizar su sueño de toda la vida de construir un parque de diversiones con el tema de las donas. Entonces contrató a la persona más inteligente que conocía, el CEO de Binance, Changpeng Zhao, para manejar todos los detalles financieros. La perspicacia para los negocios de Homer no es tan refinada como su gusto por las donas, y pronto se encuentra gastando todo su presupuesto en un paseo de donas de gran tamaño. Pero sigue siendo optimista y continúa presentando su visión a posibles inversionistas; después de todo, ¿quién no querría invertir en un parque cuyo lema es "No te preocupes, sé feliz"? Homer es realmente el mejor padre del mundo, ya que les enseña a sus hijos a ser optimistas, sin importar cuán terrible se vea el mercado de las criptomonedas.